El fenómeno de la comunicación se está imponiendo en el mundo moderno, aunque con cierto escepticismo sobre la capacidad de los profesionales de la comunicación para dar respuestas concretas a los problemas que plantean las empresas y las instituciones. Inspirándose en campos a veces distantes, como la sociología y las matemáticas, la comunicación ha ido adquiriendo con el tiempo recursos metodológicos y herramientas potentes, cuyo dominio la ha convertido en una auténtica profesión con ramificaciones muy diversas, que interesan por igual al mundo de la empresa, la política y las instituciones.